Obsequio de amor

 
Después de varias noches sombrías
asolada en medio de mareas vacías,
la brisa del mar me obsequió su amor.
 
Sus manos como olas abrazaron mis sentimientos
para hundirme en su mar calmo, tierno.
 
Hoy somos dos
habitando un solo corazón palpitante,
inhalando del mismo aire
hollando la misma arena
remando el mismo bote.
 
Su aroma de amor me desborda
cuando desenreda mis cabellos al aire,
cuando aprieta mis mejillas para besarme.
 
Entonces…
 
Pongo mis manos en su pecho abisal
y cierro mis ojos
para agradecer a la brisa del mar,
mi obsequio
mi amor.

Entradas populares de este blog

Ciclo para dos

Ejercicios: Si tuvieras que darle las gracias a alguien

AMORDAZANDO EL CUERPO